En un ambiente de reflexión, la asamblea escuchó atentamente la homilía del sacerdote, que comparó las vidas de los jóvenes con la de las aves, que hace mucho tiempo rompían el cascarón y ahora se enfrentaban al desafío de volar muy lejos del hogar. Una vez terminada la celebración, se aprovechó la ocasión para entregarle a cada uno de los alumnos que egresaron, la insignia del Instituto de manos de los Hermanos de la comunidad y del Rector del colegio, Claudio Arellano. También el Centro de Padres entregó un presente a todos las familias que dejan el colegio, y en forma especial se homenajeó a la apoderada del 4ºA Sra. Olivia Ormazábal por su permanente colaboración en las distintas actividades que se realizan en el colegio. Posteriormente, los presentes se dirigieron al sector del estacionamiento del colegio, donde se bendijo la cruz regalada por la generación que egresó este año del ISF. Para finalizar la noche, profesores, apoderados y alumnos disfrutaron de un rico cóctel en el patio techado, donde se entregó el cuadro con la foto de curso a cada uno de los egresados, un hermoso recuerdo de la que fuera su segunda familia durante muchos años.
 
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