El religioso, quien por motivos de salud vivía desde mayo en la Casa de Reposo de los Hermanos Maristas, siempre quiso volver a nuestro Instituto, y este hecho fue el motivo por el cual la congregación aceptó dejar para siempre su cuerpo junto a la comunidad que tanto quiso y que se congregó en masa en el Gimnasio Marista donde se realizó su misa fúnebre. La eucaristía fue presidida por el Padre Héctor Fuentes, Vicario para la Educación de la Diócesis de Rancagua, párroco de Malloa, y capellán del colegio. En el altar, el sacerdote fue acompañado por los prelados Fernando Armijo, Alcibíades Morales, Julio Guerrero y Danilo Yáñez. En su discurso de despedida al recordado religioso, nuestro rector, Claudio Arellano, anunció que desde el sábado pasado el Gimnasio del Colegio Marista sanfernandino llevará el nombre del fallecido Hno. Raúl Figueroa, quien en su trabajo constante y abnegado por la Congregación Marista tuvo al deporte como un agente importante en la formación de los jóvenes. También se hizo presente en las palabras el Vicario para Chile de la Provincia de Santa María de los Andes, Hno. Mariano Varona, quien junto con dar antecedentes biográficos de nuestro Hermano Raúl, destacando su alto grado de obediencia y amor a su obra, remarcó el alto interés de la comunidad de que los restos fueran sepultados en San Fernando. El Alcalde de la ciudad y exalumno marista, Juan Paulo Molina, tuvo palabras de elogio para el fallecido religioso, quien en 2004 recibió el título de Ciudadano Ilustre, otorgado por el Concejo Municipal de la ciudad, y resaltó el hecho del decreto de Duelo Oficial dictado tras su fallecimiento, producto de la activa presencia que tuvo el Hno. Raúl en San Fernando. Finalmente el Presidente del Centro de Padres del ISF, Francisco Cumsille, recordó la resistencia que tuvieron los apoderados a la partida del Hno. Raúl, cuando la congregación decidió su traslado a la Casa de Reposo de los Hermanos Mayores, sin embargo agradeció el hecho de tener de regreso al religioso marista, esta vez para siempre en el suelo que tanto quiso, a través de 31 años de su intensa vida. Luego de la ceremonia religiosa, los restos del Hno. Raúl Figueroa fueron trasladados hasta el Cementerio Parque San Fernando, donde se dio cita una gran multitud de exalumnos y personas ligadas tanto al ISF, como a las organizaciones donde el religioso prestó apoyo, y que fueron testigos de escenas de profundo recogimiento en el lugar donde el querido religioso ahora descansa en paz.  
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